Muchos hemos sido educados bajo la creencia de que ser vulnerable significa ser débil, y en realidad ella es parte esencial de nuestra naturaleza. Cuando uno la reconoce, la puede mirar y se puede mostrar vulnerable; cambian los vínculos, cambian las formas de conversar, de hacer… porque nos reconocemos como seres humanos.
¿Hay posibilidades de no ser vulnerables? ¿Se trata de una emoción? ¿Se trata de un juicio? ¿Es lo mismo vulnerabilidad que fragilidad? En esta charla abordamos esta temática desde la reflexión compartida.
Te invitamos a compartir tus reflexiones: